• Esta iniciativa, que se logró a través de la creación de la Línea para actividades productivas de personas con discapacidad, hace parte de la apuesta de sostenibilidad de Bancóldex como banco de desarrollo empresarial.
• Se trata de recursos crediticios que recibieron empresas de personas con discapacidad o que apoyan la inclusión de esta población.

Con el fin de apoyar la actividad de las micro, pequeñas y medianas empresas de todos los sectores económicos de personas con discapacidad y/o que apoyen la inclusión productiva de esta población, Bancóldex, en el marco de su compromiso por la sostenibilidad, creó la Línea para actividades productivas de personas con discapacidad a través de la cual los empresarios recibieron financiación preferencial por $1.000 millones.

De acuerdo con información recogida por el Banco Mundial en el 2021, la exclusión productiva de las personas en condición de discapacidad significa una pérdida de entre 5% y 7% del PIB mundial. En Colombia, según el último reporte del DANE de noviembre de 2020, se han identificado 3.134.037 personas con dificultades, de las cuales 1.784.372 presentan dificultades severas. De este último grupo, el 46,3 por ciento de los hombres con discapacidad reportó estar trabajando, mientras que el porcentaje de mujeres es menor, con un 31,5 por ciento.

Las principales beneficiarias de los desembolsos de esta línea de crédito han sido las micro y pequeñas empresas, con un 92 por ciento, y los principales sectores más beneficiados fueron comercio con 25 por ciento de los recursos desembolsados, e industrias manufactureras con 25 por ciento.

“Desde Bancóldex seguimos trabajando para disminuir las brechas de acceso al financiamiento y promover el empleo de las poblaciones más vulnerables. Estos recursos son un apoyo al impulso de las actividades productivas de las personas con discapacidad y a la inclusión de esta población en el acceso a financiación”, aseguró Javier Díaz Fajardo, presidente de Bancóldex.

Esta línea incluía importantes beneficios para promover la inclusión financiera y el acceso al mercado laboral de las personas con discapacidad, entre los que destacan plazos de hasta 5 años con periodos de gracia de hasta 12 meses. Los destinos de los créditos fueron 92% para capital de trabajo y 8% a inversión fija.